Vito Mielnicki Jr.

Mielnicki derrotó por KOT a DeLomba ¿La velada de PBC del día de Navidad fue un tremendo éxito? Análisis de un engaño propagandístico

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Prudential Center, Newark, Estados Unidos. Peso wélter.

Unos pocos días después de que Premier Boxing Champions ofreciese una velada el día de Navidad, se publicaron las cifras de audiencia, provocando estas un estallido entusiasmado de diversos expertos estadounidenses: con un pico de casi 6.000.000 de espectadores, una media de 2.700.000 en conjunto y una media de 1.800.000 en el combate estelar, los números parecían de entrada un tremendo éxito. Sin embargo, aunque muchos se apresuraron a afirmar que los dos grandes favoritos de este evento, o sea Vito Mielnicki 10(7KO)-1 y Joey Spencer, son gigantescas estrellas en auge que generan ya un enorme interés, el hecho es que con un análisis cuidadoso esto resultó más que cuestionable.

Antes de nada se debe señalar que la velada fue emitida por FOX inmediatamente después de un partido de fútbol americano que tuvo la gigantesca audiencia media de 28.000.000 de espectadores. Por lo tanto, que se redujese la audiencia media hasta 2.700.000 en la posterior emisión de la velada de boxeo es realmente deprimente. Que la cifra se desmoronó con el paso del tiempo queda claro además si tenemos en cuenta que el pico de 6.000.000 se produjo al comienzo de la cartelera de boxeo tras el fin del fútbol americano y que en el último choque del evento, el estelar, los espectadores se situaron ya en 1.800.000. Dicho de otro modo, sumándose los que tardaron en cambiar de canal tras el partido de fútbol americano y los que se dejaron la televisión encendida y se dedicaron a otras cosas durante la noche de Navidad a los fans fieles al pugilismo, no hay ningún motivo para el júbilo por los números que arrojó el evento.

Por si quedase alguna duda, además, el aspecto del estadio del cartel Mielnicki-DeLomba durante el evento fue en gran medida fantasmagórico, con unas cuantas filas llenas en el segmento frente a las cámaras, mientras que los laterales y las filas superiores estaban muy vacíos. Así, aunque algunos han invitado a PBC a organizar más eventos el día de Navidad en otras temporadas tras el “éxito” que creyeron ver en esta velada, realmente el conglomerado promocional debería pensárselo dos veces o al menos incluir choques más interesantes.

Y es que, por si no fuese suficiente el haber vendido una historia propagandística falsa respecto a la audiencia, además se quiso convertir un duelo mal emparejado y una actuación bastante convencional del favorito en una extraordinaria muestra de grandeza latente. El encuentro, de hecho, no tuvo a penas interés, con Nicholas DeLomba 16(5KO)-4(2) básicamente persiguiendo lento, rígido e irresolutivo a un Mielnicki por lo general móvil y que con más cadencia de golpes en forma de rectos y cortas combinaciones de hooks marcó claramente la diferencia asalto tras asalto.

En el tercer round Mielnicki dañó a su oponente con una derecha a la contra, aunque no logró terminar con él, y en diversos momentos amagó con parar su desplazamiento y tomar la iniciativa, pero el duelo se fue consumiendo repetitivo y sin que DeLomba pareciese ni siquiera cerca de reaccionar hasta que en el décimo asalto un nuevo recto diestro al contragolpe dejó afectado al no favorito. Entonces Mielnicki se abalanzó en busca del knockout y, tras un clinch, el árbitro paró el encuentro a petición de la esquina del propio DeLomba.

Con 19 años y 11 combates, Mielnicki tiene toda su carrera por delante y posee cualidades para que en el futuro pueda llegar a ser una figura con cierto relieve si es conducido de la manera adecuada y sabe evolucionar. Pero precisamente por tener cierta proyección, y recordando como han acabado de mal muchos prospectos inflados ridícula y negligentemente por la propaganda, es necesario no poner presión añadida, además sustentándola en falsas narrativas, sobre un Mielnicki que ahora mismo no es más que un jovencísmo prospecto con mucho que pulir.