Moussa Gholam después de la victoria ante Mauro Perouene

Moussa Gholam sumó victoria antes del límite, Cyrus Pattinson tuvo más trabajo del esperado

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Pabellón del Valle de Hebrón, Barcelona, España. Peso superpluma.

Aunque el parón ha afectado más que a otros al peso superpluma Moussa Gholam 17(10KO)-0, que estuvo un año y medio sin combates y por ello salió de la lista WBO, su rendimiento no ha decrecido, algo que quedó de manifiesto en su segundo combate del año, en el que superó y castigó al capaz argentino Mauro Álex Hasan Perouene 12(6KO)-4(1)-1 hasta que la esquina de éste tiró la toalla en el octavo asalto.

Perouene podría haber supuesto a otros púgiles complicaciones aunque fuese meramente por su posición zurda, pero Gholam no tardó en adaptarse y en llegar con ganchos diestros abajo, cruzados de esta misma mano al rostro, hooks zurdos y con otros golpes aislados pero muy bien escogidos. Con ellos, Gholam ensangrentó pronto la nariz del argentino, lo condujo hacia las cuerdas y le obligó a buscar algún clinch, aunque los momentos de apuro en el segundo round se vieron sucedidos en el tercer asalto por un repunte de los pasos laterales de Perouene y por golpes disuasorios que le resultaron útiles para disminuir el peligro y sorprender con alguna tenue mano.

De todos modos, poco tardó Perouene en volver a verse sacudido por los contundentes puños de Gholam que, incluso manteniendo una actitud agresiva y permaneciendo cercano a su contrincante, lograba también quitarse un considerable número de manos con acciones defensivas oportunas.

Ni mucho menos puede decirse que Perouene tuviese una mala actitud, que se rindiese o que no se mostrase todo lo activo que podía, pero aunque realizó desplazamientos, intentó ser competitivo y sacó algún buen gancho zurdo a la contra para alcanzar a su oponente cuando se sobreconfió, Gholam tiró de capacidad de desborde para impactar muchos claros golpes de poder que pusieron de manifiesto el buen encaje de su rival. Pese a esto, y cuando quedaba menos de un minuto para la conclusión del combate, un largo clinch, no separado por el árbitro, de un muy desgastado Perouene convenció a su esquina de la necesidad de tirar la toalla.

Pattinson tuvo que aplicarse
La retransmisión de DAZN se inició con un triunfo unánime del peso superwélter británico Cyrus Pattinson 2(1KO)-0 que, aunque por su proyección y gran experiencia amateur era muy claro favorito, se encontró con mucho más trabajo del esperado ante el rumano Dumitru Vicol 1(1KO)-2, quien sólo perdió por cartulinas ajustadas de 58-57 y doble 58-56.

Como en su debut, Pattinson tuvo un gran manejo del golpeo al cuerpo, controló la distancia de forma bastante adecuada y explotó su variedad de recursos para lograr decantar la mayoría de asaltos en el comienzo. Sin embargo, el púgil rumano es fuerte, resistente y tiene dimensiones similares (si no ligeramente superiores) al favorito, de modo que, combinándose ello con la intención de aprovechar lo mejor posible esta inesperada gran oportunidad, explotó la falta de cautela de un Pattison que le infravaloraba para llegarle con cortos ganchos y rectos, responder puño por puño en varios cruces de golpes en corta y media-corta y, en definitiva, ni mucho menos dejarse arrollar.

Si bien el invicto no debió quedarse tanto tiempo en corta ante un rival ante el que tenía superioridad en destreza pero no necesariamente en fortaleza, perdiendo así rounds, a base de astucia, habilidad y bagaje amateur Pattinson enlazó afilados jabs con esquivas de cintura, directos y ganchos zurdos poco potentes con reposicionamientos y bloqueos con algún curvo en corta para decantar intercambios decisivos y conseguir el triunfo más trabajado de lo previsto ante un Vicol que cerró el combate con bastante acierto en corta.

Fuera de emisión quedó finalmente una nueva victoria del invicto británico Youssef Khoumari 13(5KO)-0-1, que logró una decisión mayoritaria ante el veterano argentino Vicente “Mono” Rodríguez 39(21KO)-8(2)-1.