Ukashir Farooq

Ukashir Farooq venció por amplia decisión unánime a Luis Castillo, “Hopey” Price derrotó al invicto Claudio Grande

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Sede central de Matchroom Boxing, Brentwood, Reino Unido.

Después de que Barrett y Ford se anotasen victorias en el tramo de Fight Camp emitido por YouTube, en el arranque de la retransmisión de DAZN el peso gallo británico Ukashir “Untouchable” Farooq 16(6KO)-1 logró una amplísima victoria unánime sobre el aguerrido mexicano Luis Gerardo “La Sombra” Castillo 28(18KO)-3. Las puntuaciones fueron excesivas con doble 100-90 y un 100-91.

El voluntarioso Castillo hizo esfuerzos para llegar contra su oponente con su uno-dos-hook en la media-larga y con curvos en la media-corta, pero las acciones elusivas del ordenado y hábil Farooq redujeron su eficacia notablemente a la vez que prepararon contragolpes certeros con rectos diestros, uppercuts o hooks. De ese modo, inicialmente el británico no se acercó demasiado a las cuerdas en su desplazamiento y pudo usar entradas y salidas y buenos reposicionamientos para mantenerse en torno al centro del ring e incluso tomar eventualmente la iniciativa.

Con todo, una vez más Farooq terminó cayendo en absurdos estatismos y en intercambios en corta en los que tenía muy poco que ganar, recibiendo algunos nítidos curvos de parte de un Castillo lleno de tesón y con una apreciable cadencia de golpes. Es cierto que el mexicano tuvo precipitación y que padecía una clara desventaja en destreza, factores que le exponían ante la precisión de su adversario, pero hubo momentos en los que era posible pensar que Farooq estaba tomando decisiones tácticas erróneas que le estaban haciendo la pelea físicamente más exigente de lo que debería haber permitido.

En cualquier caso, por la adecuada gestión de los golpes de poder y por los buenos momentos en su oscilante uso de su mayor técnica, Farooq logró en las cartulinas de los jueces el margen que le valió la victoria poco después de la mitad, asentándose su superioridad en un tramo final en el que utilizó mejor su juego de piernas con series de rectos y en el que Castillo empezó a verse desgastado por las recurrentes manos erradas y por los golpes recibidos.

Siendo 14º WBC y habiendo un título de este organismo en juego, la victoria podría permitirle a Farooq escalar algunos peldaños en el ranking del peso gallo, si bien en principio su próximo paso está ya decidido. Y es que hace unos días el BBBofC, el organismo que regula el boxeo en Reino Unido, ordenó una revancha entre Farooq y Lee McGregor por el campeonato británico, interesantísimo duelo en la escena de su país que además podría llegar a tener consecuencias internacionales a modo de eliminatoria.

“Hopey” Price volvió a vencer
Por lo que se refiere al quinto combate del prometedor peso supergallo británico Ivan “Hopey” Price 5(1KO)-0, éste siguió adelante con su ascenso derrotando a su primer rival invicto, el italiano Claudio Grande 5(3KO)-1, siendo la cartulina del juez-árbitro de acertado 58-55.

Combinándose una buena gestión de los espacios con una notable ventaja en altura y alcance y con precisas manos, Price empezó con buen pie usando sus largos rectos apoyados en movimientos para reconducir la presión de su oponente. Grande trató de acelerar sus pasos, logrando encerrar brevemente y sin grandes resultados a su adversario, pero fue estremecido un tanto por un directo a la contra en el segundo asalto.

Puede que en el tercer round el visitante ofreciese sus mejores momentos aprovechando que había encerrado a su rival y conectando algunos curvos ante los que Price no tuvo una gran respuesta. Con todo, aunque el italiano intentó repetir esta situación, Price recurrió a los clinches y a oportunos pasos laterales o hacia atrás para cortar el ritmo de su oponente y en los intervalos seguir haciendo valer sus rectos para certificar su triunfo. Por si quedase alguna duda de éste, además en los últimos instantes del sexto episodio «Hopey» derrumbó sobre la lona a Grande con una tremenda izquierda a la contra, pudiéndose levantar el púgil y responder a la cuenta del árbitro, que se desarrolló ya tras el tañido final.