Panya Pradabsri

Pradabsri conservó su cinturón mundial WBC mínimo en gran combate contra muy tenaz Ngiabphukhiaw, que le estremeció

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Nakhon Sawan, Tailandia. Campeonato mundial WBC del peso mínimo. Primera puesta en juego voluntaria del titular Pradabsri.

Cuando se anunciaron las tarjetas el monarca tailandés Panya Pradabsri 37(23KO)-1 había obtenido una amplia victoria a los puntos sobre el novato retador voluntario, también tailandés, Danai Ngiabphukhiaw 9(5KO)-3(1), cumpliéndose en ese sentido lo esperado. No obstante, pese a ser esto cierto, ello no refleja de manera justa cómo se desarrolló el combate, en el cual aspirante materializó una de las evoluciones más rápidas que se han visto en los últimos años en la división del peso mínimo, pasando de tener un boxeo muy falto de pulir ante rivales muy modestos a ofrecer una estupenda actuación ante un experimentado púgil y campeón mundial. El triunfo de Pradabsri fue por decisión unánime, siendo las tarjetas de excesivo 118-110 y de más razonable 117-111.

Aunque no había dado muestra alguna hasta ahora de tal habilidad, el joven y zurdo Ngiabphukhiaw usó en el primer round un gran dinamismo acompañado de cruzados de mano adelantada y breves combinaciones, boxeo eficaz y con el que incomodó al campeón. Pradabsri tenía evidente peligro, llegando con aislados duros directos diestros arriba y abajo o con eventuales ganchos zurdos, pero para ser una pelea en la que Ngiabphukhiaw había sacado de la nada un boxeo móvil, el aspirante no lo estaba haciendo para nada mal, conectando afilados contragolpes.

De todos modos, tan pronto como en el segundo round el retador se vio llevado también a la distancia corta y media-corta, impactando Pradabsri duros hooks contra un Ngiabphukhiaw que, pese a sus buenos esfuerzos por desplazarse y contragolpear, fue alcanzado con dureza por ganchos y rectos también en el tercer asalto. En muchas ocasiones el monarca tenía casi que correr de frente lanzando su jab para llegar contra su ágil rival, que sacaba contras mecanizadas con impresionantes reflejos, pero los golpes de poder de Pradabsri iban impactando salteados ante un púgil que nunca había ido más allá del sexto asalto.

Hasta el cuarto round los jueces llevaban ganando 40-36 y doble 39-37 a Pradabsri, que en el quinto episodio estremeció a su contrincante con un cruzado zurdo acompañado de directo, pero Ngiabphukhiaw no dejó de moverse girando hacia la izquierda de su oponente y no estaba dispuesto a rendirse. Hubo una cierta variación en el sexto asalto, en el que el titular cedió la iniciativa y sorprendió con contragolpes en croché de izquierda a Ngiabphukhiaw, pero fue en el séptimo round en el que se produjo un hecho realmente impactante: Pradabsri quedó tocado por un formidable cruzado zurdo al mentón y fue hostigado por su contrincante, aunque por coraje el campeón sostuvo durísimos intercambios en los que terminó impactando también tremendos curvos.

Por el enorme esfuerzo realizado y por los tremendos golpes recibidos, parecía que Ngiabphukhiaw terminaría por verse mermado una vez que no había podido lograr el knockout y su adversario se había recuperado, pero siguió corriendo por el ring y saliéndose de los encierros, incluso cuando era sacudido repetidamente por brutales directos. Así, aunque hasta el octavo round iba perdiendo por doble 78-74 y un 80-72, continuó ofreciendo una encomiable actuación pese a los fortísimos y nítidos puños recibidos en el décimo asalto, realizando de hecho contraofensivas decididas en los últimos dos rounds buscando un knockout que no estuvo cerca de llegar.

Que Ngiabphukhiaw saliese derrotado de este complicadísimo choque tan temprano en su carrera era de esperar, pero mostró tanta resistencia, voluntad y cualidades técnicas que realmente puso de manifiesto que puede llegar a ser un peso mínimo de mucho nivel en el futuro, teniendo sólo 21 años. En cuanto a Pradabsri, éste no lució demasiado, pero ante un púgil que estuvo tan por encima del boxeo que se suponía que tenía, tampoco se le puede reprochar mucho por verse sorprendido hasta cierto punto. Sea como sea, posiblemente esta compleja defensa voluntaria servirá para que muchos vean más ajustada ahora la revancha obligatoria que Pradabsri tiene que disputar ante el exmonarca Chayaphon Moonsri (abajo en la imagen), que en el respaldo venció por KOT en el tercer round con un gancho al hígado a un modesto rival.

Chayaphon Moonsri