La exretadora mundial Ebanie Bridges logró cuestionable victoria ante Mailys Gangloff

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Emerald Headingley Stadium, Leeds, Reino Unido. Peso gallo.

Abriendo la cartelera principal del Warrington-Lara II combatió la exretadora mundial australiana Ebanie Bridges 7(3KO)-1, quien pese a lesionarse una mano se hizo con una cuestionable victoria a los puntos en un igualado duelo contra la muy voluntariosa francesa Mailys Gangloff 5(2KO)-3. El juez-árbitro dio un 77-76 a favor de Bridges que no coincidió con las puntuaciones de la mayoría de observadores.

La púgil francesa, sabiendo que Bridges sólo busca el combate en la distancia corta y media, optó por un acertada estrategia muy dinámica, logrando con sus desplazamientos que Bridges tuviese que esforzarse mucho más que en su anterior combate para llegar con sus manos. Asimismo, Gangloff utilizó alguna corta serie de rectos y algún tenaz curvo en corta para tratar de hacerse respetar cuando quedaba encerrada en las cuerdas. De todos modos, los cruzados diestros, los ganchos zurdos y los rectos de derecha de Bridges eran en muchas ocasiones los golpes más contundentes y nítidos de los rounds, por lo que pese al buen planteamiento y la gran actitud de Gangloff ésta tenía complicado impresionar más a los jueces que la boxeadora de la promotora, o sea Bridges.

Sea como sea, los fallos defensivos de la australiana eran muy importantes, desmidiendo su agresividad al igual que, por ejemplo, contra Courtenay y quedando en muchas ocasiones parada y frontal, si bien Gangloff tenía menos explosividad y técnica que la citada monarca británica y ello impedía que pudiese marcar la diferencia claramente. Tras unos episodios en los que se detuvo más en corta, Gangloff estuvo más dinámica en el sexto round usando sus rectos en larga ante una Bridges irresolutiva y sacando curvos a la contra con mucho tesón con reducidos espacios, pero carecía de la consistencia y la regularidad para desdibujar completamente a su contrincante, que terminaba impactando curvos potentes en el cuerpo a cuerpo.

En definitiva, por sus características y por las cualidades y, sobre todo, los defectos de ambas, el cruce se prestaba a un desarrollo igualado, tónica que se mantuvo hasta el final, aunque esto no quita que en los últimos rounds Bridges pareció desfondarse más que su oponente y que Gangloff a base de persistencia conectó algunos buenos derechazos que a ojos de muchos fueron suficiente para que mereciese la victoria o como mínimo el empate.

Algunos señalan que da igual qué aspecto tenga Bridges y que actitud tenga si boxea bien, pero lo cierto es que su boxeo no es bueno y que si Matchroom Boxing le da tantas oportunidades y centra mucho de su contenido de redes sociales en ella no es por otra cosa que por su aspecto y actitud. Dicho de otro modo, hay muchos boxeadores y boxeadoras que como Bridges tienen mucha agresividad pero que son alcanzados por multitud de golpes de poder en cada combate a causa de sus carencias técnicas, aunque ninguno de ellos recibe la exposición que se le da a la oceánica, lo que sugiere que debe haber motivos extradeportivos, o sea su aspecto y actitud, los que le valen las oportunidades. Y es que, por si alguien no ha mirado su récord, su palmarés y su proyección no la hacen una apuesta promocional conveniente desde un punto de vista estrictamente deportivo.

De todos modos, Hearn sabe que cuando la sitúa en una cartelera se le presta atención, de modo que seguramente le ofrecerá en el futuro, quizás tras alguna pelea de desarrollo más, una pelea importante ante una púgil con mucho potencial, hablándose ya de un posible duelo ante una Ellie Scotney que pese a ser una boxeadora con una personalidad discreta, desconocida por muchos y con menor bagaje profesional parece en perfectas condiciones de vencer claramente a Bridges.