Amanda Serrano es proclamada vencedora ante Daniela Bermúdez

Amanda Serrano venció por knockout en el noveno asalto a Daniela Bermúdez para afianzarse en la cumbre libra por libra

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Plaza del Quinto Centenario, San Juan, Puerto Rico. Campeonato mundial femenino WBC-WBO del peso pluma. Primera defensa de sus cetros unificados por parte de Serrano.

Dado que en el récord de la puertorriqueña Amanda “Real Deal” Serrano 40(29KO)-1-1 no abundan las púgiles del máximo nivel pese a sus continuos cambios de división, le hacía falta una pelea crucial ante una púgil de gran relieve para demostrar verdaderamente hasta dónde llega su boxeo. Pues bien, midiéndose a una top 10 libra por libra, en larga racha de triunfos, con una carrera muy exitosa y actual campeona del peso gallo y del supergallo como la argentina Daniela “La Bonita” Bermúdez 29(10KO)-4(1)-3, Serrano evidenció que sin duda alguna es una de las mejores boxeadoras de la actualidad, deshaciéndose de su rival por knockout en el noveno round tras una buena actuación.

Desde el comienzo se produjeron intercambios, ya que Serrano tomó la iniciativa y atacó con decisión a su aguerrida rival, que le replicó con manos claras (facilitadas por sus habituales descuidos defensivos) pero que fue alcanzada por más puños potentes y nítidos. Y es que, aunque las series de rectos y los cruzados de mano adelantada que Bermúdez lanzaba en contraofensivas llegaban a su objetivo, la ventaja en explosividad y ejecución de golpeo de Serrano decantaba de su lado las acciones a través de precisos ganchos y crochés.

De todos modos, una pelea de tanta intensidad podía suponer riesgos innecesarios para Serrano, que desde el tercer round ajustó, no sostuvo ataques tan prolongados y se movió más buscando el contragolpe. Así, Serrano llegó con buenos directos y curvos de mano adelantada ante una Bermúdez que, avanzando más frontal y teniendo menos técnica, se fue viendo crecientemente neutralizada en sus intentos ofensivos, pareciendo además un tanto cansada después de la mitad de la pugna.

Tirando de coraje y voluntad, en el séptimo round Bermúdez aceleró sus acciones y consiguió llegar con algunas manos más que en los rounds precedentes, pero para el octavo round este amago de reacción había sido ya contenido. Es más, en el penúltimo episodio, dos ganchos al torso (uno de izquierda y otro de derecha) lanzados por Serrano impactaron contra Bermúdez, que dañada se dio la vuelta y se alejó de su rival. Con todo, a diferencia de Maxi Hughes hace una semana, Serrano no atacó por la espalda a su adversaria, sino que la dejó marcharse hasta que puso la rodilla en la lona, donde recibió la cuenta completa del árbitro sin ponerse en pie.

Habiendo vencido todos los rounds según los jueces y habiendo noqueado a una top 10 libra por libra (la primera derrota antes del límite de Bermúdez), Serrano, que además tuvo momentos de muy buen boxeo, demostró que no es sólo una púgil con una impresionante capacidad para bajar y subir divisiones y que captura cetros vacantes arrollando a rivales modestas, sino que ante retos del máximo nivel puede rendir también como muy pocas en el boxeo actual. Es cierto que Bermúdez ascendía de división y que capturó algún round más de lo que dijeron las cartulinas parciales de los jueces, pero tiene similares dimensiones a Serrano y además fue desdibujada tácticamente más allá los aspectos físicos.

En estos momentos existe una tendencia de que las boxeadoras insignes, apoyadas por sus promotores, intenten proclamarse campeonas indiscutidas de sus categorías para seguir aumentando la repercusión mediática del pugilismo femenino, por lo que la situación es favorable para que se pueda ejecutar el plan ya trazado meses atrás de que Serrano pueda unificar tres coronas ante Jelena Mrdjenovich en una próxima subida a un ring.