Oleksandr Usyk

Usyk derrotó por decisión unánime al duro Dereck Chisora

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Wembley Arena, Londres, Reino Unido. Peso pesado.

Arriesgando su posición de aspirante obligatorio WBO del peso pesado, el excampeón indiscutido del peso crucero Oleksandr Usyk 18(13KO)-0 superó su mayor test hasta la fecha en la categoría máxima derrotando al veterano exretador mundial Dereck Chisora 32(23KO)-10(3) por merecida decisión unánime y puntuaciones de 117-112 y de doble 115-113.

El fortísimo Chisora comenzó con mucho peligro, conectando curvos al ataque muy amenazadores ante un Usyk que no lograba evitar pelear en corta y que entre agarres intentaba bloquear de la mejor manera posible. De todos modos, tras unos primeros asaltos muy exigentes, Usyk comenzó a mostrarse más eficaz en su desplazamiento, a contragolpear con su directo zurdo y a perder un tanto a Chisora con cambios en la dirección del giro. Todo ello a la vez que el británico se mostraba tempranamente cansado.

Esto no hizo desparecer el riesgo de “War”, que siguió llegando con buenos golpes de poder aislados, pero Usyk ya no padecía una presión tan intensa ni tan encima de él, anotando directos disuasorios, crochés de mano adelantada y empezando a trazar diagonales. Es más, en el quinto round los contragolpes del ucraniano sacudieron ya ligeramente a Chisora, que crecientemente frustrado y desgastado persiguiendo a un oponente cada vez más móvil y eficaz no volvía a encontrar manos tan relevantes como en el comienzo.

Alcanzado el séptimo round Chisora estaba mucho más estático, por lo que Usyk puedo ir variando alturas con sus rectos, consiguiendo de nuevo sacudir a su adversario con contragolpes antes de dejarlo claramente tocado al final del round. De hecho, en los últimos instantes del octavo episodio un croché zurdo de Usyk volvió a estremecer al local.

De todas maneras, como Chisora es un boxeador con mucho tesón y fortaleza todavía en el noveno asalto trataba de arremeter para intentar sorprender, conectando también algunos buenos hooks en intervalos en el décimo asalto. No obstante, la destreza, la precisión y los recursos de un Usyk en mejor estado de forma le valieron para hostigar salteadamente con ciertos crochés y rectos a su rival en el último tramo y asegurarse la victoria.

A priori puede padecer que, al haber tenido tanto trabajo contra Chisora, futuros combates de Usyk ante la élite podrían ser demasiado para él, si bien realmente la lectura no es tan sencilla. En su momento, cuando era un prospecto del peso crucero, muchos dudaron de las capacidades de Usyk para llegar a reinar en esa categoría cuando Pedro Rodríguez, como Chisora, lo llegó a sacudir con tenaces embestidas con curvos. Con todo, Usyk terminó convirtiéndose en monarca indiscutido.

Por otro lado, aunque algunos ningunean el nivel de dificultad de Chisora, no se puede perder de vista que no hace tanto tiempo por dos veces llevó al borde de la derrota a un Dillian Whyte que muchos consideraban el número 1 de los aspirantes de la categoría, así que Usyk no afrontó un reto precisamente fácil.

Sea como sea, es cierto que su desempeño en el cuerpo a cuerpo no fue bueno, como tampoco lo ha sido en ningún tramo de su carrera, cosa que se ve agravada en una división en la que puede tener frente a sí a un adversario con muchos más kilogramos de peso que él.

Aun así y aunque Usyk no hizo la mayor de las declaraciones de intenciones en este combate, el duelo no deparó grandes sorpresas para quienes conocían a ambos boxeadores, ya que el previsible empuje inicial de Chisora terminó siendo contenido cuando el ucraniano desplegó su repertorio. Asimismo, estilísticamente hay varios púgiles de la cumbre que podrían resultarle mucho más sencillos al ucraniano, a quien que se le debe reconocer el mérito de vencer a un boxeador mucho más pesado apoyándose sólo en sus cualidades pugilísticas combinadas con una gran preparación.

Por todo ello, y no siendo necesario sobreanalizar (antes de las WBSS muchos criticaron duramente a Usyk y le auguraron un pésimo futuro por su actuaciones ante Michael Hunter y Thabiso Mchunu), el hecho es que la andadura de Usyk en el peso pesado sigue adelante, que se mantiene como retador oficial del campeón Anthony Joshua y que cuenta con una movilidad y una habilidad que difícilmente pueden ser neutralizadas, por lo que supondrá un test para todo aquel que no pueda terminar imponiendo de forma definitiva su potencia.