Tyson Fury

Tyson Fury no pudo derribar a acabado Derek Chisora, que aguantó diez asaltos

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Daniel Pi
@BastionBoxeo

Tottenham Hotspur Stadium, Londres, Reino Unido. Campeonato mundial WBC del peso pesado. Tercera puesta en juego del titular Fury.

Lo peor que puede hacer un campeón mundial duramente criticado por una nefasta selección de oponente es ofrecer además una pelea aburrida y en la que ni siquiera pueda derribar a su rival, precisamente lo que hizo Tyson Fury 33(24KO)-0-1. Y es que su infinidad de agarres hicieron difícil de ver un combate ante un Derek “War” Chisora 33(23KO)-13(4) que a penas tuvo éxitos, y que recibió muchos golpes claros, pero que llegó hasta el décimo asalto antes de que el árbitro decidiese acabar con ese bochornoso espectáculo.

Como siempre, Chisora salió a presionar y a buscar acortar la distancia, pero sus combinaciones de hooks fueron detenidas rápidamente por largos clinches en los que Fury buscó cansarlo. Además, entre sus numerosos agarres y sus desplazamientos, Fury asestó duros directos diestros, rápidos jabs, uppercuts diestros a la contra y algún que otro gancho zurdo que movió a su contrincante.

Con su mezcla de directos en larga, contras oportunas, desplazamientos y agarres en corta, Fury estableció un evidente dominio muy pronto y en el segundo round arrinconó y hostigó con sus golpes de poder a Chisora. Tal y como ha sucedido en tantas de sus peleas recientes era difícil no pensar que Chisora estaba poniendo en peligro absurdamente su salud mientras recibía uppercuts, ganchos y cruzados en las cuerdas y era estremecido.

Fury vio que “War” estaba ya cansado en el tercer round, así que para llevarlo a una situación aún peor, en un agarre cargó su peso sobre él y ambos cayeron al tapiz. Aun así, en el cuarto asalto Chisora intentó lanzarse al ataque y llegó con algún curvo, pero hasta ahí prácticamente llegaron los éxitos del aspirante, que en adelante continuó siendo controlado cómodamente por Fury. Los silbidos se empezaron a dejar oír en contestación a una pelea aburrida y con constantes clinches buscados por el campeón, así que Fury intensificó algo sus acciones en el séptimo round y llegó con alguna buena derecha.

Sin embargo, pese a sus golpes claros, a sus forcejeos y empujones (el árbitro miró para otro lado durante toda la pelea) y a que tenía delante a un púgil acabado, Fury no pudo derribar legalmente a Chisora. Así que el árbitro, no por piedad, sino para intentar echar una mano al favorito, paró la pelea repentinamente en el décimo asalto poniendo fin a la enésima paliza de la carrera de Chisora.

Esta atrocidad de combate no sólo se le perdonará a Fury rápidamente debido a la verdadera idolatría que ha creado a su alrededor la propaganda, sino que seguramente muchos de sus seguidores incluso alabarán desmedidamente la actuación del que consideran número 1 del peso pesado. Al resto, sólo les quedará esperar a que Fury en su próximo combate se mida a Oleksandr Usyk o Joe Joyce (ambos vieron el choque en el estadio) para poder ver un enfrentamiento del peso pesado con alicientes. A los dos se dirigió Fury tras la pelea, mostrando una vez más hasta qué punto es maleducado con sus faltas de respeto, coreadas por 60.000 personas, hacia el siempre profesional y respetuoso Usyk.


Tyson Fury

Tyson Fury was unable to knock down the finished Derek Chisora, who resisted ten rounds

Daniel Pi
@BastionBoxing

Tottenham Hotspur Stadium, London, United Kingdom. WBC world heavyweight championship. Fury’s third defense of his title.

The worst thing a world champion harshly criticized for an awful opponent selection could do is to offer a boring fight in which he can’t even knock down his opponent, precisely what Tyson Fury 33(24KO)-0-1 did. In a boring bout with a huge amount of holding against Derek «War» Chisora 33(23KO)-13(4), who hardly had successes and who received many clear blows, Fury needed to reach the tenth round before the referee decided to put an end to that embarrassing spectacle.

As always, Chisora tried to press and close the distance, but his combinations of hooks were quickly stopped by long clinches in which Fury looked to tire him out. In addition, between his numerous holds and his movements, Fury landed hard right hands, quick jabs, right counter uppercuts and some left hook that rocked his opponent.

With his mix of long straight punches, well-timed counters, movements and clinches at short range, Fury established an obvious dominance early on and in the second round he already cornered and punished Chisora with his power shots. As has been the case in so many of his recent fights, it was hard not to think that Chisora was absurdly endangering his health as he took uppercuts, hooks and overhands on the ropes.

Fury saw that «War» was already tired in the third round, so to take him to an even worse situation, in a hold he used his weight to drop him and they both fell to the mat. Even so, in the fourth round Chisora tried to throw attacks and landed some hooks, but that was almost the last success of the challenger, who from then on continued to be easy controlled by Fury. The fans in attendance began to protest the boring fight full of clinches created by the champion, so Fury intensified his actions somewhat in the seventh round and connected some good right hands.

However, despite his clear punches, his dirty use of clinches and his shoving (the ref looked the other way throughout the fight) and despite having a finished fighter in front of him, Fury was unable to legally knock Chisora down. So the referee, not out of mercy but to try and lend a hand to the favorite, stopped the fight abruptly in the tenth round ending the umpteenth beating of Chisora’s career.

This awful matchup will be quickly forgiven to Fury due to the true idolatry that the propaganda has created around him, and surely many of his followers will even praise blindly the performance of what they consider the number 1 heavyweight. As for the rest of boxing fans, they will have to wait for Fury to face in his next fight Oleksandr Usyk or Joe Joyce (both watched the bout in the arena) to see an interesting heavyweight bout. Fury challenged both of them after the fight, showing once again to what extent he is impolite with disrespectful words, applauded with enthusiasm by 60,000 persons, towards the always professional and respectful Usyk.