Gervonta Davis es declarado vencedor ante Isaac Cruz

Gervonta Davis llegó por segunda vez a un veredicto de los jueces venciendo cuestionada decisión unánime ante tenaz Isaac Cruz

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Staples Center, Los Ángeles, Estados Unidos. Peso ligero.

Con su cadena de 16 triunfos antes del límite, el estadounidense Gervonta “Tank” Davis 26(24KO)-0 surgió como una cada vez más cotizada estrella del boxeo, especialmente por el interés creciente de los fans casuales de su país. Sin embargo, aunque su popularidad está lejos de desaparecer, anoche llegó a su fin su racha de knockouts, puesto que el mexicano Isaac “Pitbull” Cruz 22(15KO)-2-1 dio grandes muestras de tenacidad, paciencia, resistencia y valentía para alcanzar el veredicto de los jueces y ofrecer una meritoria actuación. Igualmente, Davis se hizo con una victoria unánime con tarjetas de 116-112 y doble 115-113, si bien muchos vieron este encuentro como un empate o una victoria por un asalto para Cruz.

Con un gancho zurdo en arremetida en el comienzo Cruz puso de manifiesto su peligro, llegando posteriormente con más hooks aislados o en serie ante un Davis que usó su juego de piernas, sus acciones defensivas y sus contragolpes en uppercut aunque entonces con limitado éxito. A medida que los minutos iban transcurriendo el zurdo Davis iba aumentando su eficacia, desplegando mejor su jab, anticipándose con el directo de izquierda, contragolpeando con el cruzado de mano adelantada y cortando el ritmo de su rival con clinches, pero Cruz siguió mostrando su amenaza con poderosos hooks que incluso movieron ligeramente al favorito.

Pese al tesón del mexicano, es justo decir también que éste erraba bastantes manos por las cualidades defensivas y la agilidad de Davis que, por ejemplo, con esquivas de cintura sucedidas por paso lateral o pasos atrás después de lanzar directos empezó a poner las bases para un control táctico. Es más, viendo que con sus reflejos y sus acciones elusivas quedaba en buenas posiciones de golpeo y que empezaba a evitar buena parte del peligro del mexicano, Davis tendió a acercarse más al centro del ring, en el que llegó con rectos y uppercuts a la contra. La creciente agresividad de “Tank” le llevó pasada la mitad a alcanzar la confianza suficiente para aceptar intercambios en corta en los que impactó buenos hooks, si bien recibió también duras manos de parte de un Cruz concentrado y lleno de coraje y que le disuadió de insistir en la búsqueda del knockout.

Llegados al último tercio, las puntuaciones oficiales estaban acercándose mucho ya a la certificación del triunfo de Davis, por lo que “Pitbull” necesitaba con urgencia algo que cambiase el signo del enfrentamiento, buscando esa mano decisiva en un octavo asalto en el que impactó claros uppercuts y ganchos. No obstante, si bien el visitante no se rindió y tiró hooks (legales e ilegales) tratando de dañar a su contrincante, Davis no llegó a quedar tocado de forma evidente, sino que trató de marcar la diferencia a su favor con su fugaz jab, sus contundentes rectos zurdos y cruzados de ambas manos y su control de los espacios y de las esquivas. Con todo, Davis se sobreconfió y con una actitud inadecuada dejó escapar episodios finales que hicieron que muchos cuestionasen su triunfo ante un rival altamente combativo hasta la conclusión.

Estando en marcha el proceso de reducción de campeones WBA, se debería esperar que Davis próximamente tuviese que elegir entre conservar su cinturón de subcampeón del peso ligero o del peso superligero, aunque la elección por su parte parece sencilla: estar en el camino hacia una oportunidad obligatoria ante un George Kambosos con evidentes vulnerabilidades o enfrentarse a un Josh Taylor de mayores dimensiones, top 10 libra por libra y un ejemplo de versatilidad y dureza.

En cualquier caso, más allá de este aspecto y de los enfrentamientos ante aspirantes que la Asociación le podría ordenar, Davis debería preocuparse ahora por la merma en valoración que ha padecido en este combate ante Cruz, considerando muchos que en la primera ocasión en años que ha tenido un matchmaking de cierta dureza ha sido manifiestamente menos contundente de lo habitual. Así, muchos están convencidos de que en enfrentamientos ante la cúspide absoluta del peso ligero o superligero podría estar emplazado a derrotas. Por otro lado, nueve meses después de que Cruz no tuviese un gran desempeño ante José Matías Romero, el mexicano ofreció una actuación encomiable ante una estrella de PPV, de modo que, a sus 23 años, se aseguró peleas de calibre y apoyo promocional dentro del entramado de Premier Boxing Champions.