El invicto prospecto Tim Tszyu derrotó por abandono al excampeón mundial Jeff Horn

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Queensland Country Bank Stadium, Townsville, Australia. Peso superwélter.

Este miércoles, ante miles de espectadores, algo realmente extraño en estos tiempos, el invicto australiano Tim Tszyu 16(12KO)-0 derrotó por abandono en el octavo round a su compatriota Jeff Horn 20(13KO)-3(3)-1, excampeón mundial del peso wélter conocido por su victoria ante Manny Pacquiao y su derrota ante Terence Crawford que era un gran paso adelante en aumento de dificultad para su joven oponente.

Tszyu, hijo del mítico campeón Kosta Tszyu, no se dejó enredar en la maraña de irregularidades de Horn, que comenzó el combate saltando directamente a agarres en los que forcejeó con su adversario, empujó con su cabeza, golpeó en la nuca y lanzó sus puños entre clinches. Sin embargo, aunque esta táctica le ha servido ante diversos oponentes y aunque conectó algunos buenos uppercuts en corta, Tszyu ni se amedrentó ni perdió la concentración, respondiendo de la mejor manera que pudo en los agarres con sus curvos sin dejarse avasallar por la presión de Horn.

De hecho, al transcurrir unos minutos pareció que Horn se había desgastado muy rápidamente, mucho más que su oponente, logrando Tszyu llevarse la mejor parte en corta y, cuando se creaban espacios entre ambos, conectar nítidos directos que alcanzaban a su rival tanto al ataque como a la contra. Y es que, cuanto más se apoyaba Horn en sus imprevisibles embestidas desde lejos, más sólido era el dominio de Tszyu, al que se le dio un knockdown a su favor cuando en el tercer asalto, apoyado por cierto empujón, tiró a la lona a su rival.

En cualquier caso, esta cuenta no iba a cambiar el devenir de la pugna, puesto que Horn cada vez iba a menos ante un Tszyu que conectaba hooks más claros sin espacios y que cuando su contrincante caminaba el ring le llegaba con sus rectos y ganchos zurdos al hígado. Fue precisamente con uno de estos puños al torso, acompañado de una derecha a la cabeza, con lo que logró hacer que Horn pusiese la rodilla en la lona nuevamente, produciéndose una cuenta que dejó más claro que el final se estaba acercando. Así fue, puesto que tras mantener Tszyu un poco más su trabajo al cuerpo con los ganchos y su uso de los rectos al rostro, y aguantar bien en los forcejeos provocados por su mermado contrincante, antes del comienzo del noveno episodio el equipo de Horn optó por que su púgil abandonase.

Mostrándose metódico y determinado enfrentándose al rival más difícil de su carrera profesional hasta la fecha, un Horn que además cuenta con un estilo de boxeo tan correoso como poco convencional, Tszyu consiguió un triunfo incuestionable que le hace llevar su carrera a un nuevo nivel. Si hasta ahora sólo había tanteado el circuito australiano, ahora directamente ha logrado una victoria ante un excampeón mundial conocido y posicionado en el top 15 (12º IBF del peso medio), por lo que en adelante su carrera se sitúa en la lucha para acceder a un gran combate, empresa en la que se verá ayudado por su clasificación de 5º IBF, 9º WBO y 12º WBC del peso superwélter que ahora se verá sustancialmente mejorada.